Siento que podría desaparecer y sería como otro día mas para otras personas, como Valente, llevada a una cabaña sin rumbo, asfixiada entre las llamas del olvido, así suene un poco dramático, así es como me imagino, la cero importancia que tendrían muchas personas al enterarse de mi desaparición. Una noche le preguntaba a una amiga que me quería mucho, le pregunté: ¿si yo desaparezco o me muero? ¿sufrirías?, me dijo que ¡si!, obvio que sufriría, pero también lo superaría, le seguía preguntando, como una pelotuda que pasaría si me muero o desaparezco, era hermoso ver sus labios moverse recreando ese momento, yo solo miraba la belleza de lo que podría ser verla sufrir POR MI, al final el ego ganó, solo quería saber que tanto alguien podría pensar en ese momento y ponerse triste. Soy un maldito humano, me sentía como Valente, un hermoso final, lamentablemente yo no soy un emperador y probablemente no quedaría nada de mi, ninguna huella, ningún interés.
Lo que me asusta no es que me engañe, de lo que sentiría al ver que no estoy, tampoco que tuviera ganas de hacerlo más adelante (ella, irse de mi lado), lo que me asusta realmente es huir.
Y desaparecer otra vez.
Y desaparecer otra vez.